Crónica del curso de Hine Sensei 2016 por Antonio J. Valverde
Curso de AikidoHineSensei 2016.
Los días 14,15 y 16 de octubre del 2016, algunos miembros del centro Aikido Cartagena, tuvimos la suerte de poder asistir al curso organizado por el Centro Aikido Mallorca, impartido por KiichiHineSensei.
Acudimos a la cita con gran expectación, ya que aunque los tres que ya hemos estado en Shingu tuvimos la oportunidad de poder charlar con él, ninguno habíamos tenido la suerte de practicar en su clase (cuando fuimos nosotros, solo daba clase los sábados por la tarde).Y por supuesto no nos defraudó.
Algunas de las ideas que intentó transmitir son:
El estudio de las técnicas de Aikido lo comparó al aprendizaje de la escritura japonesa. Cuando un niño empieza a escribir los kanjis, lo hace despacio, con movimientos amplios y marcando mucho los trazos. Con el tiempo, el movimiento se hace más continuo, los movimientos pierden amplitud y ganan velocidad. Las dos formas son igualmente válidas.Además con la edad no se tiene la misma fuerza que cuando se es joven. O Senseino se movía igual con 80 años que cuando tenía 40. Con 80 años se desplazaba menos, ni tenía la misma energía ni la necesitaba para hacer correctamentelas técnicas.
Hay que practicar Aikido las 24 horas del día, con la actitud física y mental, en las acciones cotidianas, al levantarse, la postura al andar, al moverte…Practica la atención en tu día a día a las pequeñas cosas, tu posición del cuerpo, la respiración, como coges y levantas un objeto… La actitud mental debe ser de sinceridad, de alegría y de agradecimiento.Esta actitud la debemos transmitir a nuestro entorno, al compañero cuando prácticas, a la familia y en el trabajo… Siente que el Universo está en tu interior, y conecta con el Universo que también está en el interior de todos los seres de la naturaleza.
Alfonso Calvo en una charla informal, nos contaba que Hinesensei describe la visión que la mayoría de las personas tienen del Aikido; Es como cuando miramos un vaso. El que está en un lado ve una parte, el que está en frente del primer observador ve otra parte distinta y los que están en los lados ven otras diferentes, pero debemos aspirar a elevarnos y ver todo el conjunto. El Aikido no es sólo un conjunto de técnicas; esas técnicas, con la práctica necesaria para dominarlas y su aplicación en tu vida cotidiana son el camino para seguir creciendo física y espiritualmente.
Practicar con Hinesensei ha sido para mí toda una experiencia, esperaba esas explicaciones filosóficas y tenía mucho interés por conocer además su práctica. Y ha resultado ser contundente, llena de técnica y energía. Por supuesto allí había mucha gente, cada uno tenía su forma de entender las técnicas y seguro que no todos tenemos la misma forma de entender la parte espiritual, pero esta situación no debe ser un problema para que a la hora de practicar haya buen entendimiento entre todos, eso es Aikido.